Vuela alto, hermosa Alma. Aunque permanezcas siempre arraigada con fuerza a la tierra, intenta levantar tus alas al cielo para conectar con lo más elevado de tu Ser.
Eres un precioso puente entre la tierra y el cielo, el nexo de unión entre lo terreno y lo divino, con una misión hermosa e imprescindible de unidad y Amor.
Imagina tu Alma surcando los cielos entre las aves, las nubes y la Luz del sol, disfrutando de la libertad y la diversión que mereces.
Siente tu Alma libre. Imagina que vuelas entre las estrellas y todos los astros, que te fundes con el cosmos infinito y te haces uno con el Universo. Tú formas parte de ese precioso y mágico entramado.
Aligera tus alas y suelta tus temores, tus rencores y culpas. Volarás mucho más ágil y más alto si te liberas de pesadas cargas que ya no necesitas. Suelta sin miedo, amigo.
En tu esencia está el vuelo libre y sin ataduras a nada y a nadie. La libertad ilumina tus alas con un precioso color blanco y dorado que se expande desde lo más hondo de tu Ser. La vida te quiere libre y desea contemplar tu vuelo y cuidar tus alas.
Te espera la pureza del cielo y el mar infinito de las estrellas. Contempla la vida desde lo alto y cambia tu perspectiva respeto a todo. Verás un mundo más luminoso y amplio. Muévete entre el viento y siente la alegría del desapego.
Comienza moviendo tus hermosos brazos de manera suave al compás de la música de tu corazón. Baila… danza con tu cuerpo y tus sentidos y ve soltando…
Siente tu libertad. Tus pies siempre firmes en el suelo y tu Alma danzando dentro de ti, mientras viaja y se mueve por los mundos sutiles del Universo entero.
Amigo, extiende tus alas.