¿Cómo afrontas las subidas hasta alcanzar los sueños de tu vida?
Hay infinidad de posibilidades y cada una es perfecta si nos guía el corazón y el alma.
Puedes hacerlo despacio mientras disfrutas de tus pasos y del paisaje, en armonía y en calma.
O tal vez prefieras lanzarte a la aventura de correr con fuerza y alegría.
Quizá te guste dar rodeos para conocer más a fondo la existencia y sus maravillas.
O puede que tomes una línea recta y empinada, para después intentar subir hasta otra cima.
Todo es válido si tú lo decides pues la libertad de tu espíritu es la mejor compañía.