Toda la vida es circular y se mueve en ciclos de armonía, con un baile perfecto y eterno, desde las pequeñas partículas hasta lo más grande del firmamento.
Las gotas de agua que caen en forma de nieve o de lluvia, que recorren arroyos, ríos y mares, y que sin perderse siempre vuelven al cielo…
Las hojas que caen desde los árboles para nutrir el suelo y volver al ciclo natural de tierras, aguas y elementos...
Planetas, estrellas y todos los astros que danzan en equilibrio y circulan por el mar del cosmos, con geometrías ordenadas que rigen todo el Universo…
Es el ciclo perfecto de la existencia infinita, eterna… en el que tú también estás dentro.
