Todos y cada uno de tus pasos son preciosos e importantes, los pequeños y los grandes. Con ellos creas la realidad de tu vida en cada instante. Siente todos tus avances.
Caminas con tus pies, con tus latidos, tus miradas, tus sonrisas.. con cada gesto que regalas y expandes a tu alrededor. Gracias, amiga... Gracias, amigo... Paseas la vida con cada detalle.
Todo paso está dentro del hermoso plan de tu Alma y te lleva hacia la misión de tu vida... hacia ti mismo. Sincroniza tus pies con cada sonido de tu corazón y con el brillo de tu Ser. Es muy hermoso verte caminar por los senderos de la existencia, derramando flores y preciosos destellos.
Acompaña a los demás con tus pasos y tus gestos. Nadie camina sólo. Infinidad de personas y seres desean acompañarte y verte caminar en este hermoso mar de Luz.
Busca un calzado sencillo y liviano que aligere tus pasos, que alivie tus pies para que se sientan descansados y fuertes. Desecha todo aquello que te apriete en tu vida.
Camina con ligeros equipajes, con el peso adecuado para ti, para tu evolución. No cargues con pesadas mochilas... y suelta todo lo que no te ayude a avanzar.
Que tu ropa sea suave y no te impida andar con soltura. Crea abundancia en tu vida pero no lleves más de lo necesario. Al final, tu Alma siempre está desnuda.
Anda, corre, baila, juega y recorre la vida con la consciencia en cada instante, en cada parada y en cada avance. Saborea cada camino y siente tus pies en la tierra, aquí y ahora. Sencillo, suave, sereno, plácido... No necesitas tanto... Todo está contigo.
Pasea y siéntete en cada paso.